Por Jorge Cabrera Vargas

Porfirio Díaz, general defensor de la ciudad de Oaxaca al mando de tan solo 700 soldados de los 2800 que componían su brigada, diezmados ante la superioridad numérica de los franceses comandados por el general Bazaine que contaba con 10 mil hombres, pensaba seriamente en capitular.


Los hombres se encontraban agotado, por la falta de alimento y parque, para seguir combatiendo una causa perdida, desmoralizados por las deserciones, el 8 de febrero de 1865, se dirigió a la hacienda de Montoya, cuartel cuartel militar francés, y rindió la plaza para evitar más muertes innecesarias.


Dìaz fue tomado como prisionero de guerra siendo conducido a Puebla donde paso por diferentes prisiones, en marzo fue encarcelado de forma definitiva en el Colegio Carolino, en la misma ciudad de Puebla. Porfirio Díaz había escapado anteriormente de sus captores, esta vez no seria la excepción.


El 20 de septiembre un grupo de hombres se dispusieron a jugar a las cartas para distraer al resto de los prisioneros y a los celadores. Díaz aprovecho la oportunidad para escabuirse sigilosamente a una habitación sin techo, con un cuchillo como arma y un par de sogas.

Porfirio Díaz Mori


Con la ayuda de una soga subio a la azotea, librando con sigilo la vigilancia de los guardias, cubierto por la obscuridad de la noche alcanzo el otro extremo del colegio, cruzando de techo en techo con otra soga descendio hacia una casa, sin saber que abajo se encontraba un chiquero lleno de cerdos, los gruñidos de los animales lo pusieron en alerta, espero pacientemente hasta que se calmaron para salir a la calle y dirigirse a otra casa donde un sirviente ya lo espera junto con un guía, montando a toda prisa tomaron camino rumbo a la garita de Tehuacàn.


Dìaz cabalgo hasta el estado de Guerrero, donde se entrevisto con el general Juan Álvarez el 10 de octubre. Álvarez le entrego 200 armas con las que regresò a Oaxaca el 20 de noviembre, reuniendo gente para continuar la lucha contra el invasor.

El 5 de septiembre los juchitecos habían derrotado en una batalla desigual a los franceses en el istmo de Tehuantepec.

El triunfo dio nuevos ánimos a los defensores de la Patria, Porfirio Díaz tomò el control de la situaciòn, ganando una batalla tras otra, la victoria definitiva estaba cerca.

Por PanchoVillaMx