Francisco Villa coloca la placa hoy avenida Madero

El 8 de diciembre de 1914, en honor al presidente Madero asesinado en febrero del año anterior, el general Francisco Villa colocó la placa con la que le cambió el nombre a la antigua calle de Plateros.

Según las crónicas, el Centauro amenazó con buscar y matar al que osara retirarla.

Esa mañana de diciembre, Francisco Villa pidió a una parte de su tropa que le acompañara a la esquina de Plateros y San José del Real (hoy Madero e Isabel la Católica, respectivamente) y pidió que llevaran una escalera y clavos.

Seguido también de una banda de música, Francisco Villa trepó por una escalera y clavó una placa de madera en el edificio conocido como La Mexicana, con la leyenda “Calle Francisco I. Madero”.

Parece ser que es el único caso conocido en la Ciudad de México de una calle bautizada por un personaje y no por un análisis previo del Cabildo, Ayuntamiento, Asamblea de Representantes, diputados, decreto del virrey, gobernador, regente o jefe de Gobierno.