Los Grandes también lloran…
Durante la estancia del General Francisco Villa en la Ciudad de México junto con los zapatistas, éste aprovechó para visitar la tumba del Apostol de la Democracia Francisco I. Madero.
Además nombró una de las principales avenidas en “Av Madero” y el mismo colocó la placa que dijera su nombre.
Madero junto con el Vicepresidente José María Pino Suárez fue asesinado por órdenes de Victoriano Huerta a través de un golpe de Estado promovido por el Gobierno norteamericano con el embajador Henry Lane Wilson.
Madero junto con Abraham González percursor de la revolución mexicana y creador del grupo antirreleccionista fue inspiración para que Villa ingresara a las filas del movimiento armado.
Villa en ese momento del asesinato se encontraba prófugo en los Estados Unidos en particular en la ciudad de El Paso, y una vez que los revolucionarios se enteraron del asesinato, comenzaron a haber levantamientos en todo el país en contra del Chacal Huerta.
Villa dijo de Madero alguna vez: «A Madero lo vi chico en cuerpo pero grande en alma».
Por PanchoVillaMx