Ubicada en el Bolsón de Mapimí, en el centro-norte de México, es un lugar enigmático que sigue sorprendiendo a propios y extraños. Esta reserva de la biosfera, con pocos pobladores, se encuentra entre los paralelo 26 y 28 , y se compara como una zona de misterio con el Triángulo de las Bermudas, las pirámides de Giza y las ciudades sagradas del Tíbet y el Mar de Cortés.

La Zona del Silencio es llamada así porque se dice que las ondas de radio no pueden ser transmitidas normalmente y eso se da solo en pequeños áreas debido a que existen campos magnéticos.

Es posible que el magnetismo mencionado más bien influye en la frecuencia con la que se pueden apreciar numerosas estrellas fugaces que “caen” hacia el desierto y se acercan tanto que parecen bolas de fuego.

Alguna vez en el tiempo, esta gran extensión de tierra estuvo bajo las aguas del llamado Mar de Thetis, demostrado por la existencia de fósiles marinos en la zona.

Biodiversidad en la Zona del Silencio

En 1978 se creó la Reserva de la Biosfera de Mapimí, auspiciada por el programa El Hombre y la Biosfera de la UNESCO, el Instituto de Ecología, el CONACYT y otras organizaciones.

Por PanchoVillaMx