Durante la madrugada del sábado 6 de febrero de 1926, el cabo Miguel Figueroa y los soldados José Martínez Primero, Anastasio Ochoa y Nivardo Chávez, del Onceavo Batallón, saltaron el muro del panteón municipal de Dolores, en el municipio de Hidalgo del Parral, en el estado de Chihuahua y movieron la fosa número 632 exhumando el cuerpo de Francisco “Pancho” Villa.

Tumba de Francisco Villa en Hidalgo del Parral.

El capitán José Elpidio Garcilazo fue quien llevó a cabo la ejecución por mando del jefe de la guarnición, general Francisco Durazo Ruiz, y ordenó además a otro conjunto de militares a que observara a los alrededores del panteón.

General Francisco Durazo Ruiz.

Con dos barretas y una pala, los militares sacaron el féretro y lo abrieron. Nivardo Chávez saca el cuerpo y apoya la cabeza de Pancho Villa en la madera del ataúd; con una barreta lo golpea sin lograr desprenderla, sin embargo, José Martínez saca un puñal de una de sus polainas, corta la piel y cercena la cabeza, con la sorpresa de que al realizarlo resulta herido.

Cuerpo de Francisco Villa cercenado

Uno de los militares colocó la cabeza cercenada de Francisco Villa en una camisa y casi al instante huyeron del lugar con el macabro paquete, entregándolo a sus jefes.

Por PanchoVillaMx.