Estampas de la Laguna: “Estos son los hombres de antes…”

Estamos en la plaza central de San Pedro de las Colonias, frente a la casona en donde según reza el texto labrado en la placa de bronce colocada en su extremo, Francisco I Madero concibió y escribió el libro “La Sucesión Presidencial”, publicado en 1909.

El libro cobró muy pronto una enorme popularidad, porque recogía demandas democráticas ansiadas por sectores crecientes de la población. Ayudó también a convertir a su autor en el principal ideólogo y dirigente de la oposición a la dictadura del general Porfirio Díaz, que al año siguiente ajustaría 80 años y mas de tres décadas en el poder.

En 1910, estalló en Chihuahua la revolución convocada por Madero y en medio año se derrumbó el viejo régimen.


San Pedro de las Colonias, fundado en 1870, muestra los vestigios del auge económico provocado por el cultivo y venta del algodón, el “Oro Blanco”, que como el henequén en Yucatán, dio origen a grandes fortunas.

Las casonas enormes, con un estilo arquitectónico que las asemeja a castillos feudales, sobresalen y atraen poderosamente la atención del visitante. Aquí se condensan mil historias de los pioneros, de la revolución mexicana, de la geografía, marcada por el otrora caudaloso rio Nazas y hoy seco, no se si irremediablemente.


Como todas las comunidades del árido desierto, ésta se duerme después del medio día y revive al ponerse el sol, cuando miles de pájaros trinan y revolotean en el parque. Sus andadores y bancas comienzan a llenarse de gente, que pasea, habla y contempla. Gozamos del paisaje humano y de la tranquilidad, cuando se nos acerca una señora ofreciéndonos mazapanes.

Acaparo su atención y seguramente porque me ve viejo y con sombrero de fieltro me dice: “Estos son los hombres de antes, no como las chingaderas de ahora”. Me sorprende el inusitado halago, pero alcanzo a darle las gracias.

Por Víctor Orozco