El dia que supuestamente Alemania atacó a México en la Segunda Guerra Mundial
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El 13 de mayo de 1942, el buque petrolero mexicano Potrero del Llano fue hundido por un submarino alemán frente a las costas de Florida. El ataque, que cobró la vida de cinco marinos, conmocionó al país y puso fin a su neutralidad en la Segunda Guerra Mundial.
El presidente Manuel Ávila Camacho reaccionó de inmediato, enviando una nota de protesta a las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón) a través de la diplomacia sueca, tras haber roto relaciones diplomáticas con esos países en diciembre de 1941, luego del ataque japonés a Pearl Harbor.
¿Pudo Estados Unidos haber fingido un ataque nazi contra México?
1. ¿Quién se beneficiaba más con la entrada de México en la guerra?
Estados Unidos tenía un fuerte interés estratégico en asegurarse de que México no representara un flanco débil frente a posibles acciones del Eje en América del Norte. Washington también deseaba controlar los flujos de petróleo y asegurar cooperación regional. La entrada de México facilitó el patrullaje del Golfo y el control del Pacífico mexicano.
2. ¿Había tensiones previas entre México y EE. UU.?
Sí. Aunque cooperaban, México todavía recordaba las invasiones estadounidenses del siglo XIX y mostraba cierto resentimiento, además de recelo frente a una injerencia directa. Por eso, una agresión externa podría legitimar la cooperación bélica sin ceder soberanía, algo que el presidente Ávila Camacho buscó cuidadosamente equilibrar.
3. ¿Por qué no hay pruebas concretas?
Los registros históricos —de ambos lados— atribuyen los ataques a submarinos alemanes, en el marco de la campaña nazi de guerra submarina en el Atlántico. No existe documentación oficial, desclasificada o independiente, que apunte a una operación encubierta estadounidense para simular tales ataques.
4. ¿Por qué ha surgido esta sospecha?
La teoría nace de la sospecha de que el gobierno de EE. UU. pudo influir o aprovechar la situación, especialmente considerando que México no tenía interés en entrar a la guerra y que la opinión pública era mayoritariamente pacifista. Además, el segundo ataque (al Faja de Oro) se produjo justo antes del vencimiento del ultimátum mexicano, lo que muchos consideran una coincidencia demasiado conveniente.
5. ¿Es posible una operación de falsa bandera?
En teoría, sí. Las guerras están llenas de operaciones encubiertas, y EE. UU. ha recurrido a ellas antes (como el incidente del Golfo de Tonkín en Vietnam). Sin embargo, comparar ese tipo de hechos con lo sucedido en 1942 exige un análisis más riguroso y pruebas específicas, que hasta hoy no se han encontrado.
La sociedad mexicana quedó dividida. Mientras sectores progresistas y sindicales exigían declarar la guerra, otros grupos, como los sinarquistas y parte de la clase media, se oponían abiertamente, influenciados por un sentimiento antiestadounidense y rumores sobre una posible leva forzada. Una encuesta del semanario Tiempo reveló que el 59.3% de los mexicanos se oponía a entrar en la guerra.
El 21 de mayo, vencido el plazo del ultimátum mexicano, otro buque petrolero, el Faja de Oro, fue torpedeado por un submarino nazi. Ese segundo ataque zanjó el debate interno: el gobierno convocó al Congreso a sesión extraordinaria y el 1 de junio de 1942 México declaró formalmente la guerra al Eje.
Aunque el país carecía de recursos bélicos para participar activamente en el conflicto, se volcó a apoyar a los Aliados desde el frente económico y de producción. La movilización social fue clave para legitimar la decisión del gobierno. Un momento simbólico fue el funeral de Rodolfo Chacón, maquinista del Potrero del Llano, realizado el 24 de mayo en el Zócalo capitalino, con la presencia del presidente Ávila Camacho y miles de ciudadanos.
Finalmente, México envió una contribución militar directa en 1945 con el Escuadrón 201, compuesto por 300 hombres que combatieron en Filipinas.
La participación de México en la Segunda Guerra Mundial fue limitada en lo militar, pero significativa en lo político y diplomático: defendió su soberanía, se alineó con las democracias occidentales y contribuyó al esfuerzo bélico aliado sin ceder a presiones externas.
Por PanchoVillaMx
