Suspenden el envío de 8 mil efectivos a Morelos para liberar a Pascual Orozco Merino

El 11 de de abril de 1913 suspenden el envío de 8 mil efectivos a Morelos para liberar a Pascual Orozco Merino padre del revolucionario Pascual Orozco.

Al conocer la detención de su padre junto con toda la comisión de paz enviada a Cuernavaca para negociar la rendición de Emiliano Zapata, el general Pascual Orozco Vázquez hizo pública su protesta y pidió al líder suriano la pronta liberación de toda la comitiva e incluso amenazó con dirigirse a Morelos para liberar a su padre con una fuerza considerable.

Esta mañana El Diario al citar al ministro de Guerra, Manuel Mondragón, dio a conocer lo que llamó la estrategia del gobierno de Victoriano Huerta para liberar a todos los miembros de la comisión:

“El gobierno del señor general Huerta, interesándose por la vida del coronel Pascual Orozco, Sr., ha dispuesto, de acuerdo con el señor ministro de la Guerra, que la columna de ocho mil hombres que se tenía en proyecto enviar al Estado de Morelos, para batir al rebelde suriano, no se organice sino hasta nueva orden. La idea que el señor general Huerta tiene de suspender la organización de la fuerte columna, es entrar en tratos diplomáticos, diremos, con el cabecilla Emiliano Zapata, hasta conseguir la libertad del señor coronel Orozco y de más personas que se encuentran prisioneras en su compañía. Con esta determinación están completamente de acuerdo los revolucionarios fronterizos que se encuentren en esta capital, dispuestos a acompañar al Estado de Morelos al general Pascual Orozco, Jr., quien ha manifestado ir con entero gusto a batir al rebelde Zapata, aun cuando se encuentre su padre en situación difícil.


“Ayer, en los momentos en que se encontraban varios revolucionarios en el ministerio de la Guerra, hablando precisamente de este asunto, pudimos observar que hay optimismo por el resultado que se obtenga de los tratos que se hagan con el cabecilla Emiliano Zapata, pues creen que pacíficamente se puede conseguir la libertad del coronel y demás prisioneros. Luego que se hayan obtenido esta libertad, se harán nuevas negociaciones de paz con todos los cabecillas de Morelos que aún no han querido deponer las armas, incluso con Emiliano Zapata, a fin de que pongan sus condiciones, que serán atendidas por el gobierno, antes de tomar cualquier otra resolución”.


A pesar de estas declaraciones, el gobierno huertista no intentó de manera seria y formal liberar al coronel Pascual Orozco Merino o negociar con los zapatistas.

Lejos de ceder a los deseos de venganza de Orozco Vázquez, lo envió a combatir a los revolucionarios en el Norte del país. Los periódicos capitalinos, pero principalmente El Imparcial, iniciaron la campaña de morbo sobre la suerte del coronel Orozco Merino con la intención de continuar avivando el odio y la barbarie zapatista

Automóvil del padre de Pascual Orozco en el que viajó a Cuernavaca. Marzo de 1913. © (37795), México, Secretaría de Cultura – INAH – Sinafo – FN.

Via INERHM