Origen de la Serenata
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La serenata como forma musical, fue un divertimento que alcanzó enorme popularidad durante el siglo XVIII.
Se tocaba por la tarde, al anochecer, muchas veces al aire libre, y hacía las delicias de las veladas en los jardines de los palacios de los aristócratas. Curiosamente el nombre no deriva de «sera«, que en italiano es «tarde«, sino de «sereno«, «calmado» o «reposado«.
El origen de la serenata, está en las baladas que los enamorados cantaban frente a las ventanas de la amada al atardecer (serenata popular tradicional), la cual se realizaba en varios países de América Latina, como Colombia, Venezuela, México, Perú y otros, y consistía específicamente en llevar, generalmente por las noches, un conjunto de cuerdas típico y tradicional, por ejemplo un Mariachi (en el caso de México), o la Tuna (de origen español, pero que se extendió por América Latina), un dúo o un trío con intérpretes de los instrumentos típicos del país, al exterior de la casa de una dama, y hacer que el conjunto interpretara y cantara canciones para que el hombre expresara así sentimientos variados, por lo común de amor, agradecimiento o deseos de reconciliación.
Existen «teorías» con respecto al origen de la serenata popular tradicional, que afirman que ésta surgió en el siglo XVI en Italia, y que sólo se hacía a punta de mandolina, expandiéndose posteriormente a España, con las rondallas y las tunas, y que a finales del siglo XVIII llegó hasta México, extendiéndose luego por el resto de América.
En este caso, el origen de su nombre está en las palabras «noche serena«.
Durante la serenata, el enamorado esperaba la reacción de la amada, que consistía en asomarse a la ventana o el balcón, para aceptar la intención del novio, dependiendo del propósito de la dedicatoria (pedir perdón, declarar su amor, o simplemente homenajear a su novia con dulces melodías románticas y un bello ramo de flores, que delicadamente lanzaba hacia las manos de la muchacha para completar el detalle).
Por PanchoVillaMx