Monumento a la batalla de el Mortero
El Monumento a la batalla de el Mortero fue un monumento ya desaparecido que se encontraba en la calle Zarco y y calle 28 ya demolido nada menos que por el General Francisco Villa.
Cuando el general Francisco Villa llega a la ciudad de Chihuahua en el año de 1913 una vez como Gobernador revolucionario del estado de Chihuahua comienza a incautar o a expropiar bienes de la elite política y económica de la región principalmente a la familia Terrazas quienes ocupaban el primer lugar en cuanto a bienes y propiedades en todo el norte del país.
Como fue el caso de la Quinta Carolina, denominada así por la esposa de Luis Terrazas, Carolina Cuilty de Terrazas, y la convierte en universidad agrícola; él, Villa, habita la casa de Amada Terrazas, hija del cacique.
Y con ello manda derribar el Monumento a la Batalla del Mortero la cual conmemoraba un triunfo militar del terrateniente Luis Terrazas.
Pancho Villa expropia casas y las asigna a sus principales generales. Confisca por decreto los bienes muebles, inmuebles y propiedades de las familias Terrazas, Falomir, Cuilty y Creel, principalmente relacionadas entre sí por parentesco.
Sin embargo no incluye por la ayuda que le prestara alguna vez Carlos Zuloaga, o Luz Zuloaga a la familia, parientes de Terrazas y dueños del segundo latifundio mas grande de Chihuahua. Se destruye el menaje de las casas y los pianos son hechos leña para chimenea.
Todo esto recuerda pasajes de la excelente novela de Fuentes, Gringo viejo, y la película subsecuente.
El periodista Silvestre Terrazas, de filiación católica liberal, director del periódico El Correo de Chihuahua, crítico permanente del gobernador Enrique Creel, hierro de Luis Terrazas y luego secretario general de Gobierno durante el Gobierno del General Francisco Villa, rescata algunos instrumentos y los envía al Instituto Científico y Literario.
Tras la rendición de Francisco Villa en 1918, y su vida en la Hacienda Militar de Canutillo, en Durango, primero por Venustiano Carranza se van recuperando los bienes. Y hacia 1919-1920, Terrazas, por ordenes del Presidente Álvaro Obregón y por mediación del gobernador Enríquez, regresa de la ciudad de El Paso, Texas a Chihuahua en donde fallece, un 15 de junio de 1923.
No mucho tiempo después de que Luis Terrazas regresara a Chihuahua, el 20 de julio, Villa sería asesinado en Hidalgo del Parral ajusticiado por órdenes del Gobierno de Obregón y sicarios a sueldo.
Por PanchoVillaMx
