La batalla de Guadalajara de 1915
El 17 de dicimebre de 1914 las tropas de la División del Norte de Pancho Villa habían desfilado de manera triunfal en la perla tapatía luego de expulsar a las fuerzas de la División de Occidente del general Jalisciense Manuel M. Diéguez, quien había ocupado el estado desde julio de ese año bajo el mando de el General Álvaro Obregón.
Y es que el general Diéguez luego de terminar con la Convención de Aguascalientes y respaldar a Venustiano Carranza Jefe de los constitucionalistas movilizó a sus soldados amenazando el nudo ferroviario de Irapuato, plaza de relevancia para los villistas.
Es por esta misma razón que el Centauro del Norte al mando de la 2°Brigada Villa de Pablo Seañez lanzó una ofensiva, derrotando los puntos de avanzada de el General Manuel M. Diéguez y llevando la salida de este de Guadalajara.
El General Francisco Villa puso al frente de las operaciones al general Calixto Contreras y al gobernador convencionista al general Julián C. Medina oriundo de Hostotipaquillo.
El General Manuel Diéguez le había dado seguridad a Álvaro Obregón que poco antes del mes regresaría con toda su caballería a recuperar la perla Tapatía.
Al iniciar la campaña Diéguez contaba con 8 mil o 9 mil soldados y grandes recursos llegados por mar desde el puerto de Manzanillo.
Además el 6 de enero de 1915 el general Francisco Murguía, mejor conocido como “Pancho Reatas” quien venía de realizar un gran peregrinaje desde la Ciudad de México se le unió en Tuxpan, Jalisco, con cerca de 4 o 5 mil hombres que terminaron alimentados y pertrechados por Diéguez.
Desde el 10 de enero el ataque carrancista dio comienzo.
Medina al percatarse de esto solicitó refuerzos a Villa, quien envió nada menos que al general Rodolfo Fierro, juntos en reunión de generales Medina y Contreras querían desalojar la ciudad y pelear en otro sitio, aún embargo, Fierro se opuso y decidieron no abandonar la plaza como Diéguez lo hizo en diciembre y se aprestaron para defenderla.
Esto fue el inicio de diferencias entre Contreras y Fierro, que dificultaron la toma de decisiones.
Por el lado de Venustiano Carranza los orgullosos generales tampoco querían ceder el mando el uno al otro.
Diéguez venia de acompañar a Obregón en una campaña que no había conocido derrotas, mientras que Murguía sabia de las amargas derrotas a manos de los federales cuando fungió bajo el mando de González.
Aún así, se logró ponerse de acuerdo y se organizó la infantería que quedaría a las órdenes de Diéguez, conformada por cuatro brigadas a las órdenes de Esteban Baca Calderón, Melchor T. Vela, Pablo Quiroga y Juan José Ríos, Murguía tendría el mando de la caballería, con Enrique Estrada como su segundo.
La defensa de Francisco Villa se encontraba compuesta por las corporaciones de los generales Fierro, Canuto Reyes, Medina y Pedro Fabela, según Amado Aguirre ascendían a 9 mil o 10 mil hombres.
El 17 dirigida desde estación Orozco donde estaba establecido el Cuartel General, el ataque sobre la periferia de Guadalajara inició, con 2 mil hombres por la derecha a las órdenes de los coroneles Cirilo Abascal, Pablo González jr y Heliodoro Pérez.
Debían atacar por el lado de El Castillo y La Capilla cortando la vía al sureste de la ciudad. Por el 18 desde las 5 de la mañana la izquierda con otros 2 mil a las órdenes de Roque Estrada, José Murguía y Miguel S. González tenían la misión de desalojar el cerro del Picachos ocupado por las fuerzas villistas, apoyados por la caballería de Rómulo Figueroa, Miguel González y Felipe García Cantú, capturando cuatro ametralladoras y dejando 200 fallecidos y varios prisioneros y avanzaron hasta hacienda de El Cuatro donde Murguía en persona tomó el mando de las operaciones.
Por el centro Amado Aguirre con la infantería de Quiroga, Calderón, Vela y Daniel Díaz Couder, con 5 mil, aprovechando que los villistas habían debilitado el centro por el continuo ataque sobre las alas se lanzaron sobre la hacienda de El Cuatro, al caer esta quedó rota y amenazada la línea villista.
Estos se replegaron sobre una segunda línea defensiva que iba de El Cuatro hasta Lomas del Álamo, pero fue rápidamente desalojada por los carrancista y empujados a una tercera línea tendida entre Tonalá y Tlaquepaque, que fue atacada y tomada por Quiroga, perdida esta línea, Murguía entró a Guadalajara alrededor de las 20 horas, Diéguez lo hizo hasta las 10 del 19 de enero.
Los villistas se replegaron por el rumbo de Tonalá, perseguidos por Figueroa que les capturó 2 cañones de 75mm.
Cuando llegaron a Irapuato donde estaba Villa, Contreras y Reyes fueron fuertemente reprendidos, Fierro sabedor de los arranques del Centauro se presentó días después, pero de igual forma fue regañado pues lo culpaba no solo de la perdida de Guadalajara, si no de la muerte de 2 mil hombres.
Medina no buscó a Villa, se quedó entre Tequila y el Gran Nayar y el 30 atacó Guadalajara sin poder tomarla, pero tampoco dio descanso a los carrancistas, para fines de mes Villa organizó una columna entre 10 y 12 mil hombres y los lanzó sobre Jalisco.
Murguía y Diéguez nuevamente no quisieron esperarlo en Guadalajara y se movieron de nuevo a Ciudad Guzmán.
Por PanchoVillaMx