El Halconazo: Crónica de una represión anunciada

A 54 años del Halconazo: La herida abierta del 10 de junio de 1971

Ciudad de México, 10 de junio de 2025 — Hoy se conmemora un aniversario más del trágico episodio conocido como el “Halconazo” o la “Matanza del Jueves de Corpus”, ocurrido el 10 de junio de 1971 en la Ciudad de México. A 54 años de los hechos, la memoria de las víctimas sigue viva entre organizaciones civiles, sobrevivientes y familiares que claman justicia.

Durante una manifestación pacífica encabezada por estudiantes para exigir mayor presupuesto y autonomía universitaria, un grupo paramilitar conocido como “Los Halcones” atacó brutalmente a los jóvenes. El saldo oficial fue de 37 muertos, aunque testigos y organizaciones afirman que la cifra real fue mucho mayor. El ataque dejó también cientos de heridos y detenidos.

Los responsables políticos y operativos de aquella jornada siguen siendo señalados. Entre ellos, el entonces presidente Luis Echeverría Álvarez, el regente del Distrito Federal Alfonso Martínez Domínguez, el jefe del Departamento del Distrito Federal Alfonso Corona del Rosal y miembros del Estado Mayor Presidencial. A pesar de múltiples denuncias y evidencias, el caso ha quedado impune en gran medida, alimentando el resentimiento de una sociedad que no olvida.

“El Halconazo no es solo un recuerdo, es una deuda del Estado mexicano con su pueblo”, señalan activistas que año con año marchan para exigir justicia. En 2006, Luis Echeverría fue procesado por delitos de lesa humanidad, pero el caso no avanzó por falta de pruebas contundentes, lo que muchos califican como una muestra de la falta de voluntad política para enfrentar el pasado.

La masacre del 10 de junio se convirtió en símbolo de la represión estatal contra los movimientos estudiantiles y forma parte de la llamada “Guerra Sucia”, una época de persecución política y violencia de Estado en México durante las décadas de 1960 y 1970.

Este 2025, el Halconazo sigue presente en la memoria colectiva como una advertencia y un llamado: “Nunca más un México sin justicia ni memoria”.