La Mikvé de Chihuahua: espiritualidad y aguas termales en la Hacienda de los Remedios

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Un rincón de historia judía y aguas termales en el corazón de Chihuahua
Jiménez, Chihuahua. En medio del paisaje árido y sereno del sur de Chihuahua, se encuentra un sitio que combina naturaleza, historia y espiritualidad: la Hacienda de los Remedios, un espacio poco conocido que alberga aguas termales al más puro estilo del Media Oriente. Pero lo que muchos visitantes no imaginan es que estas piscinas tienen un origen profundamente ligado a las tradiciones del judaísmo.

La hacienda, ubicada en el municipio de Jiménez, fue propiedad de Don Marcos Russek, un empresario de origen judío que dejó un legado único en la región. Las pilas que hoy se disfrutan como atractivos turísticos de aguas termales no fueron construidas con fines recreativos. Originalmente, fueron diseñadas como “Mikvé”, instalaciones esenciales en la práctica judía para realizar rituales de purificación.

En la tradición judía, la Mikvé es un baño ritual donde los fieles se sumergen completamente para lograr una purificación espiritual. Para que su uso sea válido, el agua debe ser corriente y natural, nunca estancada. Es por ello que en este lugar se aprovecharon las aguas termales que brotan y fluyen constantemente, lo que convirtió a la hacienda en un sitio perfecto para cumplir con los preceptos religiosos.

Con el paso del tiempo, el lugar evolucionó hasta convertirse en un atractivo turístico, conservando su esencia y belleza natural. Hoy, los visitantes pueden relajarse en sus cálidas aguas, sin saber que están pisando un espacio que fue, en su origen, un símbolo de fe y tradición: un pedazo de Israel en tierras chihuahuenses.

Este singular encuentro entre historia, religión y naturaleza convierte a la Hacienda de los Remedios no solo en un destino de descanso, sino también en un punto de reflexión cultural que enriquece el patrimonio del estado de Chihuahua.

Por PanchoVillaMx